miércoles, 5 de septiembre de 2012

Mujer



Deseaba ser madre. Y viví el embarazo con una ilusión tremenda. Vosotr@s lo sabéis. 
Los primeros meses de Ian me tuvieron en una nube. Volando. Tanto, que no tocaba con los pies en el suelo. 

Entré en "modo madre"... cuando acabó la baja de maternidad, entré en "modo madre trabajadora"... pero no recuperé el "modo mujer".
Cada dos por tres me he repetido que debía hacer algo con todo ésto. 

M.m.m. lo gestionó de otra manera. Desde que terminó su baja de paternidad, fue incorporándose poco a poco a diferentes actividades extralaborales. No todas las que tenía antes, pero no las dejó todas.

Yo cambié mis cafés, mis comidas con amigas y cualquier forma de "me & myself" por estar con Ian. 

No lograba comprender cómo M.m.m. se "alejaba" de esa manera de nuestro hijo... cómo conseguía no estar a su lado en todo momento...

Sí... la maternidad y la paternidad NO SON en absoluto lo mismo.

Y esto es motivo de diferencias, discusiones, crisis... de todo un poco. 

Pues bien, para levantarse hay que tocar fondo, y yo creo que no hay nada más abajo de lo que he visto, o eso espero. 

Así que ahora cojo impulso y a nadar a la máxima velocidad hacia la superficie. 

- Libro en mano
- Dieta iniciada (aunque sin pasarse jejje)
- Algún que otra idea rondando la cabeza
- y muchas ganas de ser yo misma, o mejor! porque ahora además, soy madre!






1 comentario:

  1. Molts anims maca, ja veuras com mica en mica tornes a ser tu o, com tu bé dius, una tu millorada ;)

    ResponderEliminar

Cuéntame!